¿Deben los Adventistas dejar de Comer Carne?

Por Luis Antonio Palomino Samudio
Este articulo es original del sitio web Reaviviamiento, puedes leerlo tambien en su fuente oficial: http://www.reavivamiento.com/articulos/egw/carne.htm

Los pasajes mencionados son tomados de los libros que escribio Elena de White

Contenido

¿Qué debiéramos tener en cuenta para entender debidamente el tema de la carne?

“Es esencial que el lector tenga en cuenta estos hechos y la época en que se escribieron las distintas declaraciones al estudiar esta fase del tema de la carne. – Los compiladores.” (CRA 486)

“Acerca de los testimonios, nada es ignorado, nada es puesto a un lado. Sin embargo, deben tomarse en cuenta el tiempo y el lugar. Los hechos y la época.” (1MS 65)

1859: Elena White consideraba permisible comer cerdo

“Vi que sus ideas concernientes a la carne de cerdo no causarían ningún perjuicio si ustedes las guardaran para sí mismos; pero en su juicio y opinión han convertido este asunto en una prueba, y sus acciones han mostrado claramente su fe en este asunto. Si Dios requiere que su pueblo se abstenga de consumir carne de puerco, los convencerá acerca de ello.” (1T 189-190)

Nota: Al igual que el resto de cristianos de la época, Elena White no veía mayor problema con el consumo de la carne de cerdo. Sin embargo vio que si alguien quería abstenerse de comerla y al mismo tiempo imponía a otros su punto de vista causaría perjuicio a la causa. El contexto revela que aún el pueblo no estaba preparado para dar este paso. Sólo casi cinco años después, después de la organización de la iglesia, el Señor consideró conveniente convertir esta verdad en una prueba para todos.

1863: El Señor revela a Elena White la reforma pro salud

“Fue en el hogar del Hno. A. Hilliard, ubicado en Otsego, Michigan, el 6 de junio de 1863 cuando el gran tema de la reforma pro salud fue abierto delante de mí en visión.” (CRA 577-578)

1864: Se revela por qué Dios permitió comer carne

«Dios dio a nuestros primeros padres el alimento que él había establecido que la raza humana debía consumir. Era contrario a su plan que se quitara la vida a ningún ser viviente. No había de haber muerte en el Edén. El fruto de los árboles del huerto constituía el alimento exigido por las necesidades del hombre. Dios no dio al hombre permiso para consumir alimentos animales hasta después del diluvio… Y permitió que la raza longeva comiera alimentos de origen animal para abreviar su existencia pecaminosa. Pronto después del diluvio la raza humana comenzó a decrecer en tamaño y en longevidad.» (CRA 445-446)

1868: Elena White ahora reconoce que comer cerdo y otras carnes es perjudicial

«El consumo de carne de cerdo en vuestra familia os ha proporcionado sangre de mala calidad. La Hna. H necesita limitarse estrictamente a un régimen de cereales, frutas y verduras, cocinadas sin carne ni grasa alguna.» (2T 57)

«El pueblo que se está preparando para ser santo, puro y refinado, y ser introducido en la compañía de los ángeles celestiales, ¿habrá de continuar quitando la vida de los seres creados por Dios para sustentarse con su carne y considerarla como un lujo? Por lo que el Señor me ha mostrado, habrá que cambiar este orden de cosas, y el pueblo de Dios ejercerá templanza en todas las cosas.” (2T 58)

“Los que profesan estar preparándose para la traslación no deberían ser carnívoros… (2T 56)

1870: Elena White recomienda no dar ninguna clase de carne a los niños

“No debe ponerse carne delante de nuestros hijos. Su influencia tiende a excitar y fortalecer las pasiones inferiores, y tiende a amortiguar las facultades morales. Los cereales y las frutas, preparados sin grasa y en forma tan natural como sea posible, deben ser el alimento destinado a todos aquellos que aseveran estar preparándose para ser trasladados al cielo.” (2T 316)

1870: En algunos casos se permite comer carne pero en pequeñas cantidades

“En algunos casos, aun una pequeña cantidad de la carne menos perjudicial causaría menos daño que sentir un profundo deseo por ella.” (2T 342)

1884: Aún no es tiempo de dejar la carne completamente

“Ud. preguntará: ¿Eliminaría Ud. completamente el consumo de carne? Contesto: Con el tiempo llegaría a eso, pero no estamos preparados para dar este paso precisamente ahora. Con el tiempo se descartará del todo el consumo de carne. La carne de animales no compondrá más una parte de nuestro régimen; miraremos las carnicerías con disgusto…” (CRA 488)

1890: Elena White consume carne ocasionalmente pero sabe que no es lo mejor

“En ciertos casos de enfermedad o de agotamiento puede pensarse que es mejor emplear algo de carne… Cuando yo no podía obtener el alimento que necesitaba, a veces he comido un poco de carne; pero tengo cada vez más temor de hacerlo.” (CRA 471-472)

1894: Elena White elimina definitivamente la carne de su dieta

“Desde el congreso campestre de Brighton (enero de 1894) yo he eliminado absolutamente la carne de mi mesa. Existe el entendimiento de que ora sea que esté en casa o afuera, nada de esta clase ha de usarse en mi familia, o ha de ponerse sobre la mesa.” (CRA 586)

1894: Elena White creía que habían circunstancias que justificaban que algunos adventistas comieran carne

“Estimúlese el consumo de frutas, legumbres, hortalizas y pan, Un régimen de carne no es el más sano, y sin embargo yo no asumiría la posición de que la carne debe ser descartada por todos. Los que tienen órganos digestivos debilitados pueden a menudo usar carne, cuando no pueden comer legumbres, hortalizas, frutas o gachas. [Pero peligro…] Cuanto mayor sea la abundancia en que la carne componga el régimen de los maestros y alumnos, tanto menos susceptible será la mente de comprender las cosas espirituales.” (CRA 472)

1896: Elena White reconoce que la presión externa la había llevado a conclusiones equivocadas

“Tengo una gran familia que a menudo cuenta con 16 miembros. En ella hay hombres que trabajan con el arado y que derriban árboles. Estos efectúan el más vigoroso ejercicio, pero ni una partícula de carne se coloca en la mesa. No hemos usado la carne desde el congreso campestre de Brighton. No era mi propósito tenerla en la mesa en ningún momento, pero se hicieron urgentes pedidos en que se declaraba que tal persona no podía comer tal o cual cosa, y que su estómago podía digerir la carne mejor que cualquier otra cosa. De esta forma fui tentada a colocar carne en mi mesa.” (CRA 587)

1896: Se revela que comer carne afecta la espiritualidad y que la ignorancia voluntaria de este tema es pecado

«No conocéis el peligro de comer carne simplemente porque vuestro apetito lo reclama. Al participar el hombre de este régimen, coloca en su boca algo que estimula pasiones que no son santas. Emociones impías llenan la mente, y las percepciones espirituales se anublan, pues la complacencia propia tiende a corromper el gusto y el juicio. Al servir en vuestra mesa esa clase de alimentos vais en contra de la voluntad de Dios. Se produce una condición de cosas que os inducirá a desatender los preceptos de la ley de Dios» (3MS 330-331)

«Lo que comemos y bebemos tiene una influencia importante sobre nuestras vidas, y los cristianos deben conformar sus hábitos en el comer y beber con las leyes de la naturaleza. Debemos sentir nuestra obligación hacia Dios en estos asuntos. La obediencia a las leyes de la salud debe ser materia de estudio ferviente, pues la ignorancia voluntaria sobre este tema es pecado.» (3MS 332)
1899: Se confirma que la carne no es necesaria en lo absoluto

“Los hábitos y prácticas de los hombres han puesto la tierra en tal condición que la familia humana debe reemplazar los alimentos animales por otra clase de sostén. No necesitamos la carne en absoluto. Dios puede darnos otra cosa.” (CRA 459)

1900: Se anuncia a los pastores que ya es tiempo de un cambio general

“Existen preciosas bendiciones y una rica experiencia que pueden obtenerse si los ministros combinan la presentación del tema de la salud con todas sus labores en las iglesias. El pueblo debe tener la luz sobre la reforma pro salud… Los presidentes de nuestras asociaciones necesitan darse cuenta de que ya es tiempopara asumir la debida actitud en esta materia. Los pastores y los maestros han de dar a los demás la luz que ellos han recibido.” (CRA 544)

1900: Se hace del régimen una prueba para los ministros, rectores, profesores y dirigentes de iglesia

“Ningún hombre debe ser consagrado como maestro del pueblo mientras su propia enseñanza o ejemplo contradiga el testimonio que Dios ha dado a sus siervos para que presenten con respecto al régimen, porque esto traerá confusión. Su falta de consideración por la reforma pro salud los descalifica para presentarse como mensajeros del Señor.” (CRA 545)

“Hay un mensaje que presentar en cada iglesia con respecto a la reforma pro salud. Hay una obra que hacer en cada escuela. Ni al director ni a los maestros debiera encargárseles la juventud hasta que tengan un conocimiento práctico sobre este tema.” (CRA 547)

“[Dios] desea que la mente y el cuerpo sean preservados en la mejor condición de salud, y que toda facultad y atributo se hallen bajo el dominio divino, y que sean tan vigorosos como los hábitos de cuidado y estricta temperancia pueden hacerlos… Solamente los que aprecien estos principios, y han sido educados a cuidar sus cuerpos inteligentemente y el temor de Dios, deben ser elegidos para asumir responsabilidades en esta obra.” (CRA 185)

1901: Se insta a evitar los extremos. Enseñar a abandonar el consumo de carne no es un extremo.

«Hemos de relacionarnos con las masas. Si se les enseña la reforma pro salud en una manera extremista, se producirá mucho daño. Les pedimos que dejen de comer carne y de beber té o café. Este pedido es correcto, pero algunos dicen que la leche también debiera descartarse. Este es un asunto que requiere ser tratado con cuidado… Debiera eliminarse todo alimento a base de carne, pero las hortalizas deben prepararse en forma sabrosa, añadiendo un poco de leche o crema, o su equivalente.» (CRA 241-242)

1901 – 1902: Se pide a ministros y colportores dar ejemplo aún fuera de casa

“Alístense nuestros ministros y colportores bajo el estandarte de la estricta temperancia. Nunca se avergüencen de decir: ‘No, gracias; no como carne. Tengo escrúpulos de conciencia contra el comer la carne de animales muertos’. Si se ofrece té, rechazadlo, dando la razón que os induce a hacerlo.” (CRA 482)

“Dios ha provisto abundancia de frutas y cereales, los cuales pueden ser saludablemente preparados y empleados en cantidades debidas. ¿Por qué, entonces, continúan los hombres eligiendo carne? ¿Podemos tener confianza en ministros que, sentados en mesas donde se sirve carne, se unen con los demás para comerla?” (CRA 481)

“Que ninguno de nuestros ministros presente un ejemplo malo en el consumo de carne. Vivan ellos y sus familias a la altura de la reforma pro salud.” (CRA 478)

1902: Más razones para dejar la carne

“Muchas veces cuando se come carne, ésta se descompone en el estómago, yproduce enfermedad. El cáncer, los tumores y las enfermedades pulmonares son producidos mayormente por el consumo de carne.” (CRA 458)

«Mediante el uso de la carne la naturaleza animal se fortalece, y la naturaleza espiritual se debilita. Hombres como Ud., que se dedican al trabajo más solemne e importante que una vez se haya confiado a seres humanos, necesitan prestar atención especial a lo que comen… Aunque no convertimos el uso de carne en una prueba de discipulado, aunque no deseamos forzar a nadie a abandonar su uso, es nuestro deber pedir que ningún ministro de la asociación considere livianamente el mensaje de la reforma en este punto o se oponga a él.» (Ev 482)

1902: No hay excusas válidas en este tiempo

“Los que usan carne desatienden todas las advertencias que Dios ha dado concerniente a esta cuestión. No tienen evidencia de que andan en sendas seguras. No tienen la menor excusa por comer carne de animales muertos. La maldición de Dios descansa sobre la creación animal. ” (CRA 458)

1903: Se prescribe la abstinencia total de la carne

“Las hortalizas, las legumbres, las frutas y los cereales deben constituir nuestro régimen alimenticio. Ni un gramo de carne debiera entrar en nuestro estómago. El consumo de carne es antinatural. Hemos de regresar al propósito original que Dios tenía en la creación del hombre.” (CRA 454)

1905: Se indica a todos que deben abandonar su consumo

“¿No es tiempo ya de que todos prescindan de consumir carne? ¿Cómo Pueden seguir haciendo uso de un alimento cuyo efecto es tan pernicioso para el alma y el cuerpo los que se esfuerzan por llevar una vida pura, refinada y santa, para gozar de la compañía de los ángeles celestiales?” (CRA 454)

1905: No es sólo por salud sino por amor y misericordia

“¿Cómo pueden quitar la vida a seres creados por Dios y consumir su carne con deleite? Vuelvan más bien al alimento sano y delicioso que fue dado al hombre en el principio, y tengan ellos mismos y enseñen a sus hijos a tener misericordia de los seres irracionales que Dios creó y puso bajo nuestro dominio.” (CRA 454)

1909: No es una condición para los recién convertidos pero sí para los miembros más antiguos

“No hacemos del consumo de la carne una condición para la admisión de los miembros; pero debiéramos considerar la influencia que ejercen sobre otros los creyentes profesos que usan carne.” (CRA 485)

1909: Se recuerda a los ministros dar buen ejemplo para ser dignos de su salario

“¿Quiere cualquiera de los que son ministros del Evangelio y que proclaman la verdad más solemne que haya sido dada a los mortales, dar el ejemplo de volver a las ollas de Egipto? ¿Quieren los que son, sostenidos por el diezmo de la tesorería de Dios permitir que la gula envenene la corriente vital que fluye por sus venas? ¿Harán caso omiso de la luz y las amonestaciones que Dios les ha dado?” (CRA 485)

Nota: ¿Si los ministros no damos ejemplo, cómo llevará el Señor a la convicción a los miembros de iglesia? No debemos seguir ignorando las instrucciones del Señor porque otros lo han hecho en el pasado. Cuando Dios quitó la carne de la dieta de los israelitas en el desierto, Moisés fue fiel aceptando el plan del Señor para su pueblo.

1909: No seguir el régimen vegetariano pudiendo hacerlo, llevará a la pérdida de la percepción de la verdad y a la apostasía

«Los que están en situación de poder seguir un régimen vegetariano, pero prefieren seguir sus propias inclinaciones en este asunto, comiendo y bebiendo como quieren, irán descuidando gradualmente la instrucción que el Señor ha dado tocante a otras fases de la verdad presente, perderán su percepción de lo que es verdad y segarán con toda seguridad lo que hayan sembrado.» (CRA 483)

“Muchos que están hoy solamente medio convertidos con respecto al consumo de carne abandonarán el pueblo de Dios para no andar más con él.” (CRA 456) 1902

2013: ¿Qué espera Dios de nosotros hoy?

“A medida que nos acercamos al tiempo del fin, debemos elevarnos cada vez más alto en el asunto de la reforma pro salud y la temperancia cristiana” (CRA 543) 1900

«Se me ha presentado con toda claridad que el pueblo de Dios debe adoptar una posición firme contra la costumbre de comer carne. ¿Habría Dios dado durante treinta años el mensaje a su pueblo según el cual si desea tener sangre pura y mentes claras deben abandonar el uso de la carne, si no hubiera querido que prestaran atención a este mensaje?» (Ev 481) 1902

¿Debiéramos descartar también la leche y los huevos?

«Los pobres dicen, cuando se les presenta la reforma pro salud: ‘¿Qué comeremos? No podemos comprar nueces porque su precio es excesivo’… Mientras predico el Evangelio a los pobres, se me ha instruido a decirles que coman lo que es más nutritivo. No puedo decirles: No debéis comer huevos, ni leche ni crema no debéis usar mantequilla en la preparación de los alimentos. El Evangelio debe ser predicado a los pobres, y aun no ha llegado el tiempo de prescribir el régimen más estricto… Las reformas exigentes hasta el límite pueden convenir a cierta clase, que puede obtener todo lo que necesita para reemplazar las cosas descartadas…» (CRA 242) 1901

«Aunque yo descartaría la carne como perjudicial, algo menos objetable puede emplearse, y esto se encuentra en los huevos. No omitamos de la mesa la leche ni prohibamos su uso al cocinar el alimento. La leche usada debe obtenerse de vacas sanas y debe ser esterilizada… Sin embargo no debemos considerar como negación de los buenos principios el emplear huevos de gallinas bien cuidadas y adecuadamente alimentadas.» (CRA 238-241) 1901

«La leche, los huevos y la mantequilla no deben clasificarse con la carne. En algunos casos el uso de huevos es beneficioso. No ha llegado el tiempo en que debamos decir que se debe descartar completamente el consumo de leche y huevos. Hay familias pobres cuya alimentación consiste mayormente en pan y leche. Tienen poca fruta, y no pueden comprar los alimentos a base de oleaginosas. Al enseñar la reforma pro salud, como en toda otra obra evangélica, debemos tener en cuenta la situación de la gente. Hasta que podamos enseñarle a preparar alimentos saludables, apetitosos, nutritivos, y sin embargo, poco costosos, no estamos libres para presentar los principios más adelantados de la alimentación saludable.» (CRA 418) 1902

«Algunos, al abstenerse de leche, huevos y mantequilla, no proveyeron a su cuerpo una alimentación adecuada y como consecuencia se han debilitado e incapacitado para el trabajo. De esta manera, la reforma pro salud ha sido desacreditada. La obra que nos hemos esforzado por levantar sólidamente se confunde con las extravagancias que Dios no ha ordenado, y las energías de la iglesia se ven estorbadas. Pero Dios intervendrá para contrarrestar los resultados de ideas tan extremistas.» (9T 130) 1909

«Llegará el tiempo cuando tal vez tengamos que dejar algunos de los alimentos que usamos ahora, como la leche, la crema y los huevos; pero no necesitamos crearnos dificultades por restricciones prematuras y exageradas. Esperemos que las circunstancias lo exijan y que el Señor prepare el camino.» (9T 130) 1909

No le creamos a nuestro enemigo

“Algunos piensan que no pueden reformarse, que la salud sería sacrificada si ellos intentaran abandonar el uso de té, tabaco y carne. Esta es una sugestión de Satanás. Son estos estimulantes perniciosos los que con toda certeza están minando la constitución y preparando el sistema para la entrada de enfermedades agudas… El uso de estimulantes antinaturales es destructivo para la salud, y tiene una influencia anubladora sobre el cerebro, porque le hace imposible apreciar las cosas eternas. Los que aprecian tales ídolos no pueden valorar debidamente la salvación que Cristo ha preparado para ellos…” (CRA 517-518) 1867

Creámosle a nuestro Creador y Diseñador

“En los cereales, las frutas, las legumbres y las nueces (frutas secas oleaginosas) han de hallarse todos los elementos alimenticios que necesitamos. Si acudimos al Señor con mentes sencillas, él nos enseñará cómo preparar alimentos sanos, libres de todo rastro de carne.” (CRA 431) 1906
Conclusión

Apreciados hermanos. Es importante indicar que usar los textos acerca de la carne para señalar y condenar a otros es incorrecto. Hubo personas en el pasado que los usaron así y crearon gran prejuicio y desafecto por este tema. Sin embargo, como dice Elena White, «debido a que algunos han actuado repetidamente de una forma poco discreta, al imponer sus ideas respecto a la reforma pro salud, ¿se atrevería alguien a despreciar la verdad al respecto?» (6T 373)

Recordemos que aunque el Señor en tiempos de Noé permitió comer carne, no lo hizo porque fuera bueno para el ser humano, sino porque por ese medio disminuiría su tiempo de vida. ¿No estamos viviendo demasiado poco ya? Dios no quiere para su pueblo de hoy lo mismo que para su pueblo en tiempos del diluvio. Hoy quiere que su pueblo viva más y mejor, por ello debiéramos estar atentos asus últimas instrucciones respecto a la dieta.

Al igual que el tema del sábado, el dejar la carne no es para ganar la salvación, pero es necesario que habiendo sido salvos por su gracia, no olvidemos que fuimos comprados por precio para que no vivamos más para nosotros, sino para Aquel que murió para salvarnos. Cualquier cosa que Él nos pidiere, ¿no la haremos con gusto por amor a él? Él es nuestro Señor y nosotros sus siervos. Si él nos pide hoy que cambiemos nuestra alimentación ¿no obedeceremos? ¿Más aún cuando es por nuestro propio bien, el de nuestras familias y el de su iglesia? Ánimo mis hermanos y hermanas. Sé que no es fácil para muchos, pero él nos ayudará en nuestras debilidades y nos dará la victoria si nos aferramos de su fortaleza.

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Pensamiento de hoy

- Elena G. White


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