Alejandro Bullón: Mi preocupación es la unidad de la iglesia. El sueño de Dios es ver a su iglesia unida, trabajando juntos para terminar la obra, pero unidad no es lo mismo que uniformidad. Nosotros podemos ser una iglesia unida entre diversidad de colores, idiomas y culturas.
Según lo explica Bullón, la ordenación de las mujeres no es un asunto teológico o doctrinal, sino cultural.