Recursos devocionales
Querido lector, los verdaderos cristianos estamos tan obligados a diezmar hoy tanto como en la antigüedad.
«El sistema levítico no es indispensable para el diezmo; que no pertenece a su esencia. Sabemos eso porque, antes que hubiese un levita, el diezmo ya era practicado por Abrahán y Jacob. De inmediato, eso permite la implementación del diezmo en la iglesia cristiana aún con la ausencia de un sistema levítico.
La teología del diezmo no es restricta a un ambiente cultural específico o a un período histórico determinado.
La naturaleza del diezmo como algo santo, o sea, perteneciendo a Dios y no a nosotros, transciende el sistema levítico y puede ser incorporado en la teología cristiana.
El diezmo pertenecía al Señor y no a los levitas. El Nuevo Testamento los identifica (a los receptores del diezmo) como los ministros del evangelio que eran llamados por Dios y reconocidos por la iglesia para ser instrumentos especiales del Señor en la proclamación del evangelio. 1 Corintios 9:13.
El pasaje más largo sobre el diezmo, en el Nuevo Testamento, está registrada en Hebreos 7:1-10, y revela una disposición positiva en relación a ella. El autor está analizando el encuentro entre Abrahán y Melquisedec, y afirmando ciertos puntos teológicos significativos en su argumentación.
El hecho de que Abrahán dio el diezmo a Melquisedec es una clara evidencia de la superioridad del sacerdocio de Melquisedec sobre el de Arón. El pasaje presupone que el diezmo es una práctica divinamente ordenada. No hay rechazo del diezmo, antes un reconocimiento implícito de su valor y significado. Es interesante observar que visto que Melquisedec era un tipo de Jesús, se puede sugerir que, de forma simbólica, Abrahán estaba devolviendo su diezmo a “Jesús”.
- Fundamento para la Práctica Cristiana del Diezmo
- Origen Pre-Israelita
- Apoyado por Jesús
- Inferido por Pablo
- Perspectiva Positiva en Hebreos
- Resumen
- Elementos de Discontinuidad
- Relacionado al Santuario y al Templo
- Relacionado a los Levitas y Sacerdotes
- Los Levitas Entregaban el Diezmo a los Sacerdotes
- Encuesta de los Principios
- Procedimientos Diferentes en el Antiguo Testamento
- Relevancia de la Teología del Diezmo
- Los Receptores del Diezmo son Señalados por Dios
- Los Ministros y el Diezmo
- Alfolí: El Principio
- El Alfolí en el Antiguo Testamento
- Recolección y Distribución del Diezmo en el Antiguo Testamento
- Sistema de Diezmo de Acuerdo con II Crónicas 31:5-12
- Recolección del Diezmo
- Distribución del Diezmo
- Sistema de Diezmo de Acuerdo con Nehemías
- Recolección del Diezmo en Jerusalén
- Recolección del Diezmo Fuera de Jerusalén
- Distribución del Diezmo
- Principios Transferidos a la Iglesia
- El Diezmo en la Iglesia Primitiva
- El Silencio del Nuevo Testamento
- El Diezmo en la Iglesia Pos-Apostólica
El diezmo de Abram, antes de israel
En Génesis 14:20 encontramos que Abram entregó los diezmos de todo y esto no era un acto voluntario de parte de Abram, sino que prueba que Abram conocía bien el sagrado requisito de pagar el diezmo y que reconocía el sacerdocio divino de Melquisedec.
El hecho de que Abram pagara el diezmo muestra claramente que este fue una práctica instituida divinamente desde los tiempos más remotos. Al devolver al Señor una décima parte de sus ingresos, el creyente reconoce que Dios es el dueño de todas sus propiedades. Abram, de quien Dios testificó que había guardado sus mandamientos, estatutos y leyes, como se evidencia en Génesis. 26: 5, cumplía concienzudamente todos sus deberes religiosos. Uno de ellos fue devolver a Dios una décima parte de sus ingresos.
Lo más interesante es que Abram entregó su diezmo a un rey y sacerdote (Melquisedec) que vivía en la ciudad cananita, pero que era adorador de Yahweh. El diezmo fue recibido aquí por una persona no relacionada con el patriarca, sugiriendo que esa práctica no se limitaba a un único grupo étnico. Y aquí encontramos la primera luz para devolver el diezmo en la actualidad.
El diezmo apoyado por Jesús en el nuevo testamento
Lo que Jesús dice en Mateo 23:23 y Lucas 11:42 es un claro endoso al diezmo. Jesús está condenando a los fariseos que son extremamente cuidadosos en el diezmo, pero “pasáis por alto la justicia y el amor de Dios.” (Lucas 11:42). O, como Mateo presenta, “y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe.” (23:23). Jesús está haciendo eco de las palabras de Amós: el celo religioso y el compromiso con la justicia, misericordia y amor deben estar juntos (cf. Lucas 18:12). Entonces agrega: “Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello [diezmo].”
Al oír y leer los evangelios de Mateo y Lucas hoy dia, las comunidades cristianas están siendo invitadas a hacer exactamente lo que Jesús estaba requiriendo de su audiencia original. Cristo estaba afirmando el principio del diezmo entre sus seguidores.
El diezmo inferido por Pablo
«¿No sabéis que los que trabajan en las cosas sagradas, comen del templo, y que los que sirven al altar, del altar participan?» 1 Corintios 9:13. Pablo está primeramente refiriéndose al sistema usado en el Viejo Testamento para atender las necesidades de aquellos que oficiaban en el templo. Eso era hecho principalmente por medio del diezmo y, en limitada extensión, por medio de las ofrendas (cf. Números 28:8-24)
El diezmo en Hebreos
El pasaje más largo sobre el diezmo, en el Nuevo Testamento, está registrada en Hebreos 7:1-10, y revela una disposición positiva en relación a ella. El autor está analizando el encuentro entre Abrahán y Melquisedec, y afirmando ciertos puntos teológicos significativos en su argumentación. El hecho de que Abrahán dio el diezmo a Melquisedec es una clara evidencia de la superioridad del sacerdocio de Melquisedec sobre el de Arón. El pasaje presupone que el diezmo es una práctica divinamente ordenada. No hay rechazo del diezmo, antes un reconocimiento implícito de su valor y significado. Es interesante observar que visto que Melquisedec era un tipo de Jesús, se puede sugerir que, de forma simbólica, Abrahán estaba devolviendo su diezmo a “Jesús”.
Conclusión
El Nuevo Testamento no rechaza el diezmo y, tal vez lo más significativo, es que Jesús mismo colocó Su sello de aprobación en él.
El Nuevo Testamento tiene una actitud positiva en relación al diezmo. No hay ninguna evidencia de que los apóstoles lo rechazaron o se opusieron a él, considerándolo irrelevante para los creyentes.
Lo poco que el Nuevo Testamento habla sobre el diezmo sugiere conformidad con el principio del Antiguo Testamento de devolver a Dios un décimo de todo lo que ganamos y nos recuerda e su propósito e importancia.
El propósito básico para devolver el diezmo permanece igual: El Señor lo utiliza como medio de sustento de aquellos que dedican su vida a proclamar el evangelio.
Fuente: El Diezmo en el Nuevo Testamento y en la Iglesia Cristiana, Ángel Manuel Rodríguez
Si quiere leer información completa sobre el diezmo en el nuevo testamento, por favor, descargue este documento:
El Diezmo en el Nuevo Testamento y en la Iglesia Cristiana, Angel Manuel Rodriguez.
Creo que está bien errado con respecto al diezmo ya no es por la ley es por gracia si de gracia recibí da de gracia ofrendamos de todo corazón ya no estamos bajo la ley en donde dice la biblia que se debe judaisar a los gentiles somos salvos por gracia y si ofrendamos es el fruto del creyente en ayudar también a otros y también a la obra del señor aquí en la tierra si yo quiero dar el 80% no hay ley lo que uno quiere dar pero no con mesquinda de corazón
Siempre desde el AT hemos estado bajo la gracia y siempre se ha entregado el diezmo. ¿Donde encuentras en la biblia que no debemos dar el diezmo o que ya no estamos bajo la ley?
Hermanos, la entrega del diezmo desde la epoca de los cristianos gentiles hasta nuestros días, entiendo que es un compromiso personal de cada uno con Dios, implica honestidad, reconociendo que todo lo que tenemos y recibimos proviene de Dios como nuestro sustentador.
Las inferencias que se hacen no son claras. No hay nada explícito para los cristianos gentiles, es obvio que los cristianos judíos siguieron la práctica del diezmo y ofrendas hasta el año 70 d.C. ese año Jerusalén fue tomada y el templo destruído.
Como adventistas hacemos el compromiso al bautizarnos, de devolver el diezmo y ofrendas para el sostenimiento de la obra. Es claro que sin ese aporte la organización no sería operativa,
Es el punto más honesto que he leído en cuanto al diezmo dentro del adventismo.