1 Corintios 15:1-23 - (Reina Valera 1909)
1ADEMÁS os declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado, el cual también recibisteis, en el cual también perseveráis;
2Por el cual asimismo, si retenéis la palabra que os he predicado, sois salvos, si no creísteis en vano.
3Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo fué muerto por nuestros pecados conforme á las Escrituras;
4Y que fué sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme á las Escrituras;
5Y que apareció á Cefas, y después á los doce.
6Después apareció á más de quinientos hermanos juntos; de los cuales muchos viven aún, y otros son muertos.
1 La resurrección.
2 “Cristo, las primicias.”
7Después apareció á Jacobo; después a todos los apóstoles.
8Y el postrero de todos, como á un abortivo, me apareció á mí.
9Porque yo soy el más pequeño de los apóstoles, que no soy digno de ser llamado apóstol, porque perseguí la iglesia de Dios.
10Empero por la gracia de Dios soy lo que soy: y su gracia no ha sido en vano para conmigo; antes he trabajado más que todos ellos: pero no yo, sino la gracia de Dios que fué conmigo.
11Porque, ó sea yo ó sean ellos, así predicamos, y así habéis creído.
12Y si Cristo es predicado que resucitó de los muertos ¿cómo dicen algunos entre vosotros que no hay resurrección de muertos?
13Porque si no hay resurrección de muertos, Cristo tampoco resucitó:
14Y si Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra predicación, vana es también vuestra fe.
15Y aun somos hallados falsos testigos de Dios; porque hemos testificado de Dios que él haya levantado á Cristo; al cual no levantó, si en verdad los muertos no resucitan.
16Porque si los muertos no resucitan, tampoco Cristo resucitó.
17Y si Cristo no resucitó, vuestra fe es vana; aun estáis en vuestros pecados.
18Entonces también los que durmieron en Cristo son perdidos.
19Si en esta vida solamente esperamos en Cristo, los más miserables somos de todos los hombres.
20Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho.
21Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre la resurrección de los muertos.
22Porque así como en Adam todos mueren, así también en Cristo todos serán vivificados.
23Mas cada uno en su orden: Cristo las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida.