Isaías 14:12-20 - (Reina Valera 1909)

12¡Cómo caiste del cielo, oh Lucero, hijo de la mañana! Cortado fuiste por tierra, tú que debilitabas las gentes.

13Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo, en lo alto junto á las estrellas de Dios ensalzaré mi solio, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del aquilón;

14Sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al Altísimo.

15Mas tú derribado eres en el sepulcro, á los lados de la huesa.

16Inclinarse han hacia ti los que te vieren, te considerarán diciendo: ¿Es este aquel varón que hacía temblar la tierra, que trastornaba los reinos;

17Que puso el mundo como un desierto, que asoló sus ciudades; que á sus presos nunca abrió la cárcel?

18Todos los reyes de las gentes, todos ellos yacen con honra cada uno en su casa.

19Mas tú echado eres de tu sepulcro como tronco abominable, como vestido de muertos pasados á cuchillo, que descendieron al fondo de la sepultura; como cuerpo muerto hollado.

20No serás contado con ellos en la sepultura: porque tú destruiste tu tierra, mataste tu pueblo. No será nombrada para siempre la simiente de los malignos.