La Adoración Verdadera y la Falsa Adoración

¿Debemos de usar la música Rock para poder alcanzar a los jóvenes de la nueva generación?

Respuesta: “¿Usamos drogas para alcanzar a los viciados para Cristo? ¿Usamos lenguaje obsceno para alcanzar aquellos que blasfeman? ¿Robamos para nosotros identificarnos con los ladrones? ¿Producimos material pornográfico para presentar a Cristo a los pornográficos? ¿Por qué entonces deberíamos usar una música carnal para conseguir llamar la atención del mundo? Lo absurdo de esos métodos es obvio. Por lo tanto, esperamos ver como es errado usar una música carnal y mundana para presentar un mensaje santo a un mundo que está sin Cristo.

La Palabra de Dios no dice que debemos salir, copiar los modos impíos del mundo y usarlos en la evangelización. Muy al contrario, dice que debemos separarnos de la impiedad que hay en el mundo. La Palabra de Dios dice también en Santiago 4:4: ‘Adúlteros y adúlteras ¿no sabéis que la amistad del mundo es enemistad con Dios? Cualquiera pues que quiere ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios’.

La verdad para este tiempo no necesita nada de eso para convertir a las almas. el ruido desconcertante aturde los sentidos y desnaturaliza aquello que, si se condujera en la forma debida, constituiría una bendición. el influjo de los instrumentos satánicos se une con el estrépito y el vocerío, con lo cual resulta un carnaval… se me instruyó para que dijera que en esas demostraciones estaban presentes demonios en forma humana que trabajaban con todo el ingenio que satanás puede emplear para hacer que la verdad resulte odiosa para las personas sensibles…”

La lección para nosotros hoy es evidente. La música de la iglesia debe diferir de la música secular, porque la iglesia, como el Templo antiguo, es la Casa de Dios en que nosotros nos reunimos para dar culto al Señor y no para ser entretenidos. Los instrumentos de percusión que estimulan a las personas físicamente a través de un golpe fuerte y constante son tan inapropiados para la música de la iglesia hoy como lo fueron para la música del Templo del Israel antiguo.