Recursos devocionales
Aclaración: Esta publicación esta creada para Adventistas que creen en el Espíritu de Profecía. (Parece que algunos no creen). Si usted tiene discrepancias en cuanto a los escritos de Elena de White, sera mejor no leer esta publicación.
La Copa Mundial de Fútbol se esta realizando en Rusia. La pasión popular se despierta en gran parte del mundo y virtualmente toda la actividad social, económica, del entretenimiento y hasta política giran en relación al fútbol.
El Fútbol es seguramente el deporte mas popular del mundo, tiene millones de participantes, seguidores y fanáticos en cada lugar del planeta e incluso muchos adventistas son fieles seguidores de este deporte, sus equipos y jugadores famosos.
Observando la enorme fama que tiene este deporte, y el gran involucramiento de las personas y de muchos adventistas; se hace necesario hablar un poco sobre este tema, y mas ahora que inicia la competencia mundial en Rusia.
Nos preguntamos sobre si es correcto participar de este deporte, convertirse en fanático y ser seguidor de los equipos de fútbol.
También nos preguntamos sobre el correcto uso que se le puede dar a un deporte para que resulte beneficioso y podamos recrearnos.
Para aclarar estas dudas sera necesario citar algunos aportes de la palabra profética de Elena de White en referencia al deporte, la diversión y recreación. Para iniciar vamos a conocer la diferencia que existe entre la diversión y la recreación. Para esto leemos en el libro La Educación, p.187. que nos dice lo siguiente:
Hay una diferencia entre recreación y diversión. La recreación, cuando responde a su nombre, recreación, tiende a fortalecer y reparar. Apartándonos de nuestros afanes y ocupaciones comunes, provee refrigerio para la mente y el cuerpo, y de ese modo nos permite volver con nuevo vigor al trabajo serio de la vida. Por otra parte, se busca la diversión para experimentar placer, y con frecuencia se la lleva al exceso; absorbe las energías requeridas para el trabajo útil, y resulta de ese modo un obstáculo para el verdadero éxito en la vida.
Podemos comprender que la recreación fortalece y repara, mientras la diversión busca placer y generalmente absorbe energías.
Elena continuo declarando los beneficios de la recreación:
«Se me mostró que los observadores del Sábado, como pueblo, trabajan duro sin darse a sí mismos oportunidades o periodos de descanso. La recreación es necesaria para aquellos que están envueltos en actividades físicas y es aún más esencial para aquellos cuya labor es principalmente mental. No es esencial para nuestra salvación, ni para la gloria de Dios, mantener la mente trabajando constante y excesivamente, aun en los temas religiosos» Testimonios para la Iglesia, Tomo 1, pág. 450.
Como cristianos inteligentes podemos usar el fútbol como forma de recreación, aunque tristemente algunos exageran y lo utilizan como diversión desplazando el amor de Dios a un lado. Tenemos una declaración de Elena que aunque hace referencia a otros deportes (como el fútbol americano), no dejan de tener la misma esencia e intención del fútbol y de cualquier otro deporte mal utilizado:
Los juegos que ocupan una parte tan grande de su tiempo, apartan su mente del estudio. No contribuyen a preparar a la juventud para la obra práctica y seria de la vida. Su influencia no tiende hacia el refinamiento, la generosidad, o la verdadera madurez.
Algunas de las diversiones más populares, como el fútbol [norteamericano] y el boxeo, se han transformado en escuelas de brutalidad. Tienen las mismas características que tenían los juegos de la antigua Roma. El amor al dominio, el orgullo por la mera fuerza bruta, el temerario desprecio manifestado hacia la vida, están ejerciendo sobre los jóvenes una influencia desmoralizadora que espanta. La Educación, p.190.
En uno de los mensajes escritos al director del Colegio de Battle Creek en los comienzos de 1893, Elena declaro:
Cuando los alumnos del colegio se entregaron a sus juegos de competencia y al fútbol [norteamericano], cuando se dejaron absorber por las diversiones, Satanás vio propicia la oportunidad para introducirse y dejar sin efecto al Espíritu Santo de Dios que quiere modelar y usar a los seres humanos.
Es fácil alejar la influencia del Espíritu Santo mediante la pereza, la conversación y el juego. Caminar en la luz significa mantenerse avanzando en la dirección de la luz. Si uno que fue bendecido se vuelve descuidado y desatento, y no vela en oración, si no exalta la cruz y lleva el yugo de Cristo, si su amor por las diversiones y su lucha por la supremacía absorben sus facultades o capacidades, entonces Dios no es lo primero, lo mejor y lo último en todas las cosas y Satanás se presenta para desempeñar su papel en el juego de la vida por el alma humana.
Elena no condena el juego con una pelota. El problema consiste en que se convierta en una diversión que este por encima de Dios y nos aparte de Él.
Es mas, consideramos que es necesario participar en algún deporte y así poner en practica uno de los remedios naturales que es el EJERCICIO.
Veamos esta declaración:
En nuestro mundo hay bastantes cosas necesarias y útiles que hacer para que el ejercicio hecho por placer y diversión resulte casi completamente innecesario. El cerebro, los huesos y los músculos adquirirán fuerza y solidez al usarlos con un propósito, al dedicarlos a la reflexión útil y concentrada y a idear planes que desarrollen las facultades del intelecto y la fuerza de los órganos físicos. Así se dará uso práctico a los talentos otorgados por Dios, con los cuales se le puede glorificar.
No condeno el ejercicio sencillo del juego de pelota; pero aun esto, con toda su sencillez, puede ser llevado a la exageración. Consejos para la Iglesia, p. 288
Hay actividades que llevan a costumbres y prácticas mundanales, y quienes participan en ellas quedan tan embargados e infatuados que en el cielo se los declara amadores de placeres más que de Dios. En vez de quedar con el intelecto fortalecido para ser mejores estudiantes, en vez de estar mejor preparados como cristianos para cumplir sus deberes de tales, al ejercitarse en esos juegos llenan sus cerebros de pensamientos que los desvían de sus estudios….
¿Se procura sinceramente glorificar a Dios en estos juegos? Sé que no es éste el caso. Se pierde de vista el camino de Dios y su propósito. En este tiempo de gracia, la ocupación de ciertos seres inteligentes es invalidar la voluntad que Dios ha revelado, y poner en su lugar las especulaciones e inventos del agente humano, al lado del cual está Satanás para infundirle su espíritu…. El Señor Dios del cielo protesta contra la ardiente pasión que se ha cultivado por la supremacía en los juegos esclavizadores. El Hogar Cristiano, p. 453
El problema no es que sea pecaminoso participar en un juego donde se use una pelota (ni en cualquier otro juego), el problema consiste en el despilfarro de tiempo y dinero que no tiene proporción, la glorificación de los jugadores, y el aumento del amor al placer, hasta que se escribe en los libros del cielo que hay amadores de los placeres más que amadores de Dios.
Sin duda, como Elena lo aclaro, la recreación es esencial, pero una recreación que nos deje algo de valor, que no nos separe de Dios, que fortalezca nuestra mente y cuerpo y nos ayude a desempeñarnos útilmente en la vida.
En el libro Consejos para Padres y Maestro y Alumnos, pág. 441. Elena escribió:
¡Cuánto tiempo dedican los seres humanos inteligentes a
las carreras de caballos y los certámenes de cricket y de pelota! Pero, ¿Acaso la
participación en estos deportes dará a los hombres un deseo de conocer la verdad
y la justicia? ¿Mantendrá a Dios en sus pensamientos? ¿Los inducirá a preguntar:
Cómo está mi alma?
Elena hace referencia a las carreras de caballos y el cricket, que seguramente eran las diversiones mas famosas en su tiempo, sin embargo, nosotros hoy podemos preguntarnos sobre cuanto tiempo dedicamos al fútbol y otros deportes actuales, también podríamos incluir la televisión, los videojuegos, el internet.
El punto de este estudio no es pensar que es pecaminoso participar de un juego, especialmente donde se use la pelota. El punto en discusión es algo más amplio, más profundo y de un alcance mayor. Es el aumento de amor por el placer, que tan fácilmente desplaza el amor de Dios. El participar en actividades que en sí mismas pudieran ser inocentes pero en su infatuación se desarrollan en idolatría.
Comentarios complementarios
Quiero agregar algunos comentarios que el Profesor Sikberto Mark escribió precisamente en las lecciones de escuela sabática del año 2014. Son comentarios referentes al mundial de fútbol celebrado en Brasil en el año 2014. Sera bueno meditar en estos comentarios.
«Cristo y su Ley» Lección de Escuela Sabática junio-abril 2014
Comentario para la Lección 8 titulada «La ley de Dios y la Ley de Cristo», pag. 2
«El segundo mandamiento, prohíbe la fabricación de ídolos y su adoración, o de que escojamos ídolos y los veneremos, como es el caso de la verdadera veneración de los ídolos del fútbol, algo que aumentará en unas pocas semanas, quienes atraerán a miles de millones de personas que no se despegarán de la televisión. Incluso muchos adventistas dividirán su atención con Cristo. Haz una prueba para ver si el fútbol es aceptable en nuestro medio. Intenta orar por un tiempo, por ejemplo, por tu país, para que gane el Campeonato Mundial de Fútbol. ¿A quién, finalmente, escucharía Dios, si los adventistas de Alemania, Francia o los de cualquier otro país de la competencia? Tal vez a los más fervientes… Si no podemos orar por algo que está infestado de mentiras, sobornos y falsedades, que está dominado por la ambición por el dinero, la fama y el estatus, entonces no es algo conveniente para nosotros, si obviamente deseamos ser salvos. Voy a hablar mucho del fútbol a partir de ahora, tal vez logre persuadir a alguien.»
Comentario para la Lección 10 titulada «Cristo, la ley y los pactos», pag. 5
He pensado en decir algunas palabras sobre el evento que se inicia la próxima semana en Brasil, la Copa Mundial de Fútbol. Es obvio que nosotros, adventistas pueblo de Dios, no debemos involucrarnos en cualquier deporte o juego en el que esté presente la competición. No sé a cuantos podré convencer, pero haré mi parte. En un tiempo fui fanático, pero dejé esa tontería e inutilidad hace ya más de treinta años atrás. He llegado a la conclusión de que un siervo de Dios, que esté en una relación de pacto con el Creador y Salvador, no debe involucrarse con la disputa, corrupción, peleas, partidismo, robo, gasto de mucho dinero, mentiras, falsedades, desacuerdos, muertes, pérdida de tiempo y mu- chas otras cosas más relacionadas con el fútbol, que es un deporte que sistemáticamente involucra corrupción, burlas y violencia. En este preciso momento estoy acompañando a mi esposa en el hospital. Hay otra paciente en el mismo cuarto. Ayer a la noche hubo partido, Gremio contra otro club. Parece que Gremio no obtuvo el resultado esperado. Pero los compañeros de cuarto están felices, echando pestes contra los fanáticos de Gremio. ¿Podemos involucrarnos con tales actitudes sin una pérdida espiritual?
Me aterra ver cuántos de nuestros pastores, la inmensa mayoría, tiene sus equipos preferidos, asisten a partidos y algunos hasta lo comentan en sus sermones. Yo mismo he presenciado esto. La actitud de tales hombres es detestable. Hace un tiempo, estaba dando una conferencia en una de nuestras iglesias, y vestía una camisa azul. Uno de los hermanos, fanático de un equipo que utiliza una camiseta de color rojo, hizo una burla pública, que todos oyeron, contra el color azul. Tal fue mi sorpresa que no supe qué decir ante la ignorancia de este hermano fanático. ¡Y esto dentro de la iglesia!
La prueba para ver si el grado de involucramiento con el fútbol es tolerable para Dios es la siguiente: intenta orar por tu equipo favorito. Mientras tanto, que otro hermano ore por el suyo. ¿Puede admitirse esto? No, como no se puede admitir la lista de situaciones negativas anteriormente enumerada, de las cuales debemos huir. Nuestro camino es estrecho, no hay lugar en él para muchas cosas que nos atraen, y nos atrapan. Desde hace décadas que no me tienta presenciar algún partido de fútbol, ni siquiera los de la Copa Mundial. Mi esposa y yo no sentimos la menor necesidad. Creemos que es ridículo discutir con alguien cómo fue tal o cual partido, acerca del arbitro, o la tabla de puntajes, la posición de un equipo en el campeonato, etc. Pura pérdida de tiempo. ¿Tendremos todas esas cosas en la Tierra Nueva? ¿Sí o no? Si no es así, la gente que no puede pasar un día sin manifestar su fanatismo por su equipo favorito, en caso de ser salvos, en el cielo sentirán un enorme vacío por la falta de fútbol.
Unos pocos años antes de morir Elena de White reiteró: «El sentimiento popular es que el trabajo es degradante; sin embargo, los jóvenes pueden elegir a su antojo la práctica del criquet, el béisbol, o aún el box, sin que tales prácticas se les considere degradantes. Mientras que la juventud llega a ser experta en juegos que no tienen ningún valor real para ellos o para otros, Satanás juega el juego de la vida por sus almas… El lucha por embotar y absorber la mente tan completamente que Dios no hallará lugar en sus pensamientos.»
Como conclusión podemos decir que la recreación es necesaria para nuestro cuerpo y mente, una recreación que nos disponga para conocer mejor a Dios y que no nos aparte y no nos aleje del Creador.
También podemos decir que el fútbol y otros deportes pueden ser utilizados como herramientas de Satanás para distraer la atención de Dios y de las verdades eternas y llevar nuestra vida a una separación gradual del Creador.
Recuerden que no hay pecado en jugar con una pelota (por supuesto que no), es mas, es necesario recrearse de alguna manera, y puede ser con una pelota. Le invitamos a disfrutar de algún deporte pero recuerde no llevarlo a los excesos.
Fuentes complementarias:
https://egwwritings.org/
http://www.pmministries.com/centrowhite/Temas/cwmpm10.htm
http://www.iasdsanjudas.com/documentos/Libros-EP/Laeducacioncristiana.pdf
http://www.escuela-sabatica.com/files/2014/2/com/2014-02-08Sikbertotm42.pdf
http://www.escuela-sabatica.com/files/2014/2/com/2014-02-10Sikbertomb14.pdf
Pensamiento de hoy
- Elena G. White
Síguenos en las redes:
Telegram WhatsApp Facebook