«Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo.» 1 Pedro 5:6

Humillaos
Del griego tapeinóō que significa deprimir, bajar, humildemente. Humillarse es derribar del alma el orgullo, tener una modesta opinión de si mismo, estar desprovisto de toda soberbia. Humillarse es estar desprovisto de toda arrogancia y de autoexaltación y someter mi voluntad a la voluntad de Dios.
Humillarse es la extraña particularidad de dejarse enseñar por Dios, y describe la persona que depende del Señor en lugar de sí misma. La humildad interior es la virtud que se somete con gusto al gobierno soberano de Dios y busca el bienestar de los demás.
Humildad no es debilidad, sino disposición mansa y sometimiento voluntario a Dios. Es ubicar el corazón es una actitud que reciba la gracia divina para encontrar la exaltación en el tiempo de Dios.
Bajo la poderosa mano de Dios
De griepo krataiós que significa poderoso, potente, fuerte. Debido a que sirve a un Dios poderoso, el cristiano debe proceder con humildad en todas las circunstancias. Kratos se refiere al reino de autoridad, dominio y majestad de Dios.
Kratos describe la presencia de «poder de Dios» del que uno está investido y que resulta en superioridad, supremacía y victoria para el cristiano.
Esta palabra esta generalmente en conexión con la mano poderosa de Dios, especialmente en la elección y liberación de Israel.
«Señor Jehová, tú has comenzado a mostrar a tu siervo tu grandeza, y tu mano poderosa; porque ¿qué dios hay en el cielo ni en la tierra que haga obras y proezas como las tuyas?» Deuteronomio 3:24
La poderosa mano de Dios destaca el vigor inexpugnable con el que el Señor gobierna la creación y la historia. «Ha realizado proezas con su brazo» (Lucas 1:51) «la supereminente grandeza de su poder… según la operación del poder de su fuerza» (Efesios 1:19) con la que Dios que levantó a Cristo y lo exaltó por encima de todos los gobernantes y autoridades.
La poderosa mano de Dios fortalece a los santos en la tierra. «Por lo demás, fortaleceos en el Señor y en el poder de su fuerza» (Efesios 6:10). Por lo tanto, el creyente se opone a las artimañas del diablo confiando en el poder (kratos) divino en lugar de en la capacidad humana.
Para que él os exalte cuando fuere tiempo
Del griego hypsóō que significa enaltecer, exaltar, levantar. Dios promete honrar a los que voluntariamente se humillan por causa del Señor, y son exaltados, elevados a la dignidad, el honor y la felicidad.
La Biblia nos advierte que si nos exaltamos a nosotros mismos, ello dará lugar a una desafortunada caída; pero si nos humillamos a nosotros mismos, esto nos exaltará en este mundo y en el venidero.
Los “humildes” serán ensalzados por Dios en esta vida hasta cierto límite, pero lo serán más plenamente en la vida venidera.
El que esté dispuesto a ser enseñado por Dios y confíe en la conducción divina, nunca será desechado.
«El temor de Jehová es enseñanza de sabiduría; Y a la honra precede la humildad.» Pro 15:33
En el ejemplo de Cristo, la humillación y el sufrimiento precedieron a su gran ensalzamiento.
Con información del Diccionario Strong-Ultra y del Comentario Bíblico Adventista



