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Esto, para la mente que tenga sabiduría: Las siete cabezas son siete montes, sobre los cuales se sienta la mujer, y son siete reyes. Cinco de ellos han caído; uno es, y el otro aún no ha venido; y cuando venga, es necesario que dure breve tiempo. La bestia que era, y no es, es también el octavo; y es de entre los siete, y va a la perdición. Apocalipsis 17: 9-11
A lo largo de Apocalipsis 12, 13 y 17 se estaría presentando a las misma bestia espantosa y terrible pero en diferentes etapas de gobierno.
“No hay tiempo que perder. Nos esperan tiempos angustiosos. El mundo está agitado con el espíritu de guerra. Pronto ocurrirán las escenas de angustia que se describen en las profecías. La profecía del capítulo 11 de Daniel casi se ha cumplido por completo. Mucha de la historia que ha ocurrido en cumplimiento de esta profecía se repetirá. En el versículo 30 se habla de un poder que ‘se enojará contra el pacto santo, y hará según su voluntad; volverá, pues y se entenderá con los que abandonen el pacto santo.’ escenas semejantes a las que se describen en estas palabras ocurrirán.» Elena de White, Manuscript Releases, v.13, p.394 traducción pr. Stephen Bohr
¿Que simbolizan las siete cabezas de la bestias en Apocalipsis 17? ¿A quién representa la mujer prostituta llamada Babilonia? Las cabezas de dicha bestia deben formar parte de un gobierno Romano.
La mujer Babilonia de Apocalipsis 17 está descrita como “vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro y piedras preciosas y perlas, teniendo en su mano un cáliz de oro, lleno de abominaciones, es decir, las inmundicias de sus fornicaciones; y en su frente tenía un nombre escrito: Misterio: Babilonia la grande, madre de las rameras.” El profeta dice: “Ví a aquella mujer embriagada de la sangre de los santos, y de lasangre de los mártires de Jesús.” Se declara además que Babilonia “es aquella gran ciudad, la cual tiene el imperio sobre los reyes de la tierra.” Apocalipsis 17:16, 18 (VM). La potencia que por tantos siglos dominó con despotismo sobre los monarcas de la cristiandad, es Roma. La púrpura y la escarlata, el oro y las piedras preciosas y las perlas describen como a lo vivo la magnificencia y la pompa más que reales de que hacía gala laarrogante sede romana. Y de ninguna otra potencia se podría decir con más propiedad que estaba “embriagada de la sangre de los santos” que de aquella iglesia que ha perseguido tan cruelmente a los discípulos de Cristo. Se acusa además a Babilonia de haber tenido relaciones ilícitas con “los reyes de la tierra.” Por su alejamiento del Señor y su alianza con los paganos la iglesia judía se transformó en ramera; Roma se corrompió de igual manera al buscar el apoyo de los poderes mundanos, y por consiguiente recibe la misma condenación. CS 432
Pensamiento de hoy
- Elena G. White
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